Esta foto la tome durante los festejos del Bicentenario, en mayo de 2010. Me atrajo la soledad y el mundo propio e inaccesible de esta anciana, que sentada en el borde de la vereda permanecía indiferente al ajetreo festivo que tenían quienes la rodeaban.
Buenísima foto, muy triste pero buena por eso, porque transmite un sentimiento.
ResponderEliminarLamentablemente, cada vez más encontramos estos personajes en nuestra vida cotidiana. No dejo de preguntarme, cada vez que los veo, ¿cómo habrán llegado allí?
EliminarGracias por comentar.
Muchos cariños.
Estoy de acuerdo con vosotros....transmite soledad y tristeza...en medio de tanta gente....
ResponderEliminarHola Sonia, creo que lo que más conmueve, por lo menos a mí, es la indiferencia conque la gente pasa a su alrededor.
EliminarTe agradezco por comentar.
Muchos saludos.