En una gran ciudad como Buenos Aires, lo que más prima y me atrae es el anonimato, uno es uno más entre miles, pero a veces...el constante ir y venir de las personas, todas apuradas todas atropelladas produce cierta congoja, cierta soledad, cierto desconsuelo, uno se siente un simple obrero en la colmena.
Los rostros que nos rodean son severos, duros y nada amigables, los bocinazos, los apretujones, los gritos, la intolerancia, se convierten en algo cotidiano y se empieza a dudar de Buenos Aires...
Pero Buenos Aires tiene "ese no se que" que nos envuelve y al girar la mirada uno se encuentra con algo así como...este rostro..., esta dulce e inocente mirada.
¿Como dudar de Buenos Aires? ... Esos ojos, esos ojitos de mirada esperanzada nos dicen que Buenos Aires se crea y se recrea cada día y a cada instante. Seguiré adelante disfrutando del cambiante flujo de Buenos Aires y cruzaré el horizonte de mis días partiendo feliz, sabiendo que siempre habrá un nuevo rostro de asombro y amor por Buenos Aires.
¿Como dudar de Buenos Aires? ... Esos ojos, esos ojitos de mirada esperanzada nos dicen que Buenos Aires se crea y se recrea cada día y a cada instante. Seguiré adelante disfrutando del cambiante flujo de Buenos Aires y cruzaré el horizonte de mis días partiendo feliz, sabiendo que siempre habrá un nuevo rostro de asombro y amor por Buenos Aires.
En los ojos de l@s niñ@s siempre hallamos la esperanza de que todo cambie a mejor, en Buenos Aires y en todas las partes del mundo. Reflejan eso, y también por supuesto el presente que les rodea. Luego esos ojos se hacen "adultos", y visto que poco o nada cambió, buscamos otros ojos recien abiertos que vuelvan a transmitirnos esa esperanza.
ResponderEliminarMuy sentido esta reflexión Mirta, un saludo !!!
Los ojos reflejan la inocencia del descubrimiento primero. Recuerdo cuan feliz me hacia el ver a mi hijo cuando descubría algo nuevo, yo también lo descubría a través de su mirada.
EliminarGracias por tus palabras Mikel. Un saludo para vos.
Precioso, es un post que refleja tu amor por Buenos Aires, por la vida cálida y la esperanza frente al frío consumismo que nos aprieta el alma, la fría soledad de la muchedumbre sin rostro....Ahí está esa mirada de paz, de esperanza y de calor, un abrazo Mirta, siempre encuentras lo mejor para mostrarlo, gracias
ResponderEliminarGracias Alfmega, lo que me alegra de encontrar estos instantes es el tener la posibilidad de compartirlo con personas como vos, con la sensibilidad de comprenderlos, sentirlos y tener la amabilidad de tomarse el tiempo para comentarlos.
EliminarMuchas gracias por enviar calor a mi corazón y alegría a mi alma. Como siempre un gran abrazo, con todo mi afecto.
Gracias Alfmega, lo que me alegra de encontrar estos instantes es el tener la posibilidad de compartirlo con personas como vos, con la sensibilidad de comprenderlos, sentirlos y tener la amabilidad de tomarse el tiempo para comentarlos.
EliminarMuchas gracias por enviar calor a mi corazón y alegría a mi alma. Como siempre un gran abrazo, con todo mi afecto.